Merck y Moderna, dos de las grandes farmacéuticas del mundo, han trabajado en conjunto para crear la primera vacuna contra el cáncer, por lo que combatir los efectos negativos de esta enfermedad podría estar a la vuelta de la esquina.
El suero, desarrollado para pacientes con melanoma de alto riesgo, se diseñó en base a la tecnología elaborada para las dosis contra el coronavirus, reseñó El Nacional.
Actualmente, este avance de la medicina está en su segundo ensayo de tres, pero se espera que antes de finalizar el 2022 se den a conocer los detalles sobre su protección y evolución, dijo Moderna en un comunicado.
Los científicos han usado la tecnología ARNm, la cual emplea fragmentos del código genético de esta clase de tumores y sirve para mostrar a los enfermos cómo se debe paliar y rechazar esta patología, uno de los cáncer más comunes pero graves y que crece en las células productoras de melanina.
El suero se suministre a quienes ya pasaron por el quirófano y así evitar que el tumor vuelva. No obstante, aunque se trate del mismo cáncer, no actuará por igual en todos los pacientes, por lo que no habrá dos dosis iguales, explicaron las farmacéuticas.
Esto quiere decir que se adapta según el paciente para la producción de células T, una parte clave de la respuesta inmunitaria del organismo, basándose en la firma mutacional específica de un tumor.
Sin embargo, se especula que el precio de la vacuna podría ser muy costoso al ser especializada para cada cliente. Algunas inyecciones similares contra el cáncer que están en fase de prueba tienen un precio de 100 mil euros por dosis aproximadamente.
